Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).
Usualmente, los adelantos se dan en la etapa previa a un Salón del Automóvil, no durante, pero es justo lo que acaba de hacer Ford con la siguiente generación de la Explorer.
Tampoco es que lo mostrado en el Salón de Beijing haya sido especialmente revelador. De hecho, si bien se mostró el vehículo “final”, apenas se puede apreciar el perfil general al estar totalmente cubierto por una manta –azul, por supuesto-, por lo que apenas podemos apreciar volúmenes cuadrados con bordes suaves y salpicaderas remarcadas.
Además, la marca se limitó a señalar que la presentación se dará el siguiente año (quizá en el NAIAS) y que la variante para China se armará de manera local, al tiempo que confirmaron una variante ST como la de la recién revisada Edge (al lado del modelo cubierto). La promesa de variantes híbridas en su gama (hasta el Mustang tendrá una en su próxima generación) nos hace augurar una para la Explorer.
Se espera que el paquete ST reciba el motor V6 3.0 litros de los Lincoln Continental y MKZ, que en su ajuste más agresivo ofrece 400 HP y 542 Nm (400 lb-pie) de par, lo que representaría una significativa ganancia contra la Explorer Sport actual, que echa mano de un V6 3.5 litros Ecoboost con 365 HP y 474 Nm (350 lb-pie).
Compartirá la plataforma CD6 con la venidera Lincoln Aviator (adelantada por un concepto hace un mes), que puede configurarse como tracción delantera, tracción total o propulsión trasera. Además del 3.0, se esperan motores 2.3 litros L4 y 3.3 litros V6.
El fabricante también señaló que su futura estrategia para los Estados Unidos se centrará, además de los vehículos electrificados, en SUVs y Crossovers, por lo que los días de modelos como el Fiesta, el Taurus o el Fusion parecen estar contados, pues sólo se garantizó la permanencia del Mustang y el Focus en su variante “crossoverizada” Active.
No está claro si esta estrategia se replicará en México, donde el aumento del precio de los autos por la paridad de divisas y el aumento del precio de los combustibles ha limitado el crecimiento del segmento SUV/Crossover, aunque podrían resultar afectados el Fusion y el Fiesta, cuyo principal mercado son los Estados Unidos, aunque también podrían “crossoverizarse”; y no correrían peligro el Focus Sedán, que se importará desde China; y el Figo, que llega desde la India.