Por José Virgilio Ordaz.
Ya les habíamos hablado extensamente de la BMW X1 cuando se presentó hace ya un par de meses.
La tracción de serie en el eje frontal viene derivada de la Serie 2 Active Tourer, primer vehículo con ruedas motrices delanteras de serie en BMW y primer monovolumen de la marca bávara, a su vez derivada de la plataforma del MINI hatchback; nada especialmente grave, cuando el resto de sus rivales usan una configuración similar.
Que el motor vaya colocado en posición transversal y no longitudinal, principio que hizo al MINI original “pequeño por fuera y grande por dentro”, permite que esta segunda generación sea más amplia tanto en el espacio de la cabina como en el de la cajuela con 505 litros, a pesar de la reducción del largo total y la distancia entre ejes.
Sus motores diésel y de gasolina de última generación, el sistema de tracción total xDrive revisado, y la nueva tecnología en la construcción del chasis presumen un aumento de las cualidades deportivas, del confort y, también, en una considerable optimización del consumo de combustible.
El motor estrella es el 2.0 TwinPower Turbo de 228 hp y la caja una automática Steptronic de 8 cambios. Ya cuenta con faros de LED, sistema de control dinámico de la amortiguación DDC, BMW Head-Up Display, así como el sistema Driving Assistant Plus.
Deberá presentarse en nuestro mercado en un par de meses, con precios aún por confirmar.