Un Dodge Viper 1995 a la venta con 40,000 millas es una opción tentadora, pero si aparte le sumamos el tratamiento Venom 550 de Hennessey, hablamos ya de un objeto de deseo.
Por José Virgilio Ordaz.
Un Dodge Viper, del año-modelo que sea, sigue siendo al día de hoy una máquina de números respetables y rendimiento serio. Así que, ¿Qué podría hacer aún más agresivo a este coupé año-modelo 1995? Pues nada menos que el toque experto de Hennessey, por lo que hizo el viaje de California (aunque fue adquirido en Illinois) al cuartel central del preparador, en Texas. Pese a que las modificaciones se dieron tardíamente, en el año 1997, son más que bienvenidas.

Dodge Viper Hennessey 550 Venom 1995
El titánico bloque de aluminio de 8.0 litros y 10 cilindros en ‘V’ ya rendía unos saludables 400 hp y 630 Nm (465 lb-pie), pero Hennessey aplicó el paquete Venom 550, con nuevas piezas como culatas con válvulas ampliadas de acero inoxidable, un árbol de levas de alto rendimiento, balancines de relación 1:7, un cuerpo de aceleración más grande, radiador de aluminio y un sistema de admisión de aire frío. Así, la potencia se incrementaba a 546 hp y 754 Nm (556 lb-pie) de par.

Víbora verde
El Dodge Viper Hennessey 550 Venom también incluía una palanca corta para los cambios y un nuevo embrague Centerforce, porque como buena deportivo de la vieja escuela, aquí hay un cambiador manual de seis relaciones, Tremec T56. Conserva de fábrica la viperina combinación de carrocería verde esmeralda con interiores revestidos de cuero gris y tapetes negros. Hay un techo rígido al color de la carrocería con una cubierta adicional y dos cortinas laterales. Por supuesto, también conserva el sistema de escapes laterales que cocina a fuego lento a los ocupantes.

También notarán luces intermitentes tras el medallón, así como los rines de fábrica con tres gruesas aspas y 17 pulgadas, aunque los neumáticos Michelin son nuevos. Otros detalles técnicos que se mencionan son la suspensión de Brazos en A de aluminio fundido en las cuatro esquinas, así como discos ventilados para el sistema de frenado.

En el interior encontramos un volante esbelto de tres radios, reproductor de CD, así como una placa que hace constar que este fue el Dodge Viper número 56 en recibir el tratamiento Venom 550 de parte de Hennessey. El odómetro marca 40,339 millas, o 64,919 km, una cifra ciertamente contenida para un deportivo con 25 años encima, lo que en parte explica el buen estado en que se conserva. Vendido a través del sitio BringaTrailer, a última oferta está en 20,000 dólares, pero no duden que se incrementará pronto.