Por David Sánchez Olmos
Para Red Bull el gozo se fue al pozo luego de cuatro años seguidos como campeones del mundo, del 2010 al 2013, pero las nuevas reglas les han limitado bastante con un motor Renault que no ha resultado estar competitivo en relación a Mercedes y a Ferrari. Para Christian Horner, esto ya no le quita el sueño puesto que tiene varias opciones para 2017.
Todas estas opciones dependen del futuro que tenga Renault, que se menciona podría comprar de nuevo Lotus, o de plano retirarse de la F1. Horner sin embargo, sabe que tienen todavía un contrato por cumplir con la armadora francesa hasta el final del 2016, por lo que siguen enfocados al trabajo con ellos.
“Habría cierta ironía si ellos compran de nuevo el equipo que vendieron, pero por lo que se refiere a la posición que tenemos con ellos, Renault tiene darnos prioridad en lo que vayan a hacer. Cualquiera de esos escenarios incluye tener motores competitivos. 2017 podría ser un juego totalmente distinto”, declaró el inglés.
Sergio Marchionne, presidente de FIAT, dueña de Ferrari, le ofreció a Red Bull el surtirle de motores para los próximos años, pero Horner lo desestimó. “Tuvimos una buena relación con Ferrari porque dio motores a Toro Rosso por años. El Sr. Marchionne nos hizo una generosa oferta, pero por ahora estamos concentrados en lo que tenemos”, finalizó Horner.