Una historia de más de seis décadas llega a su fin; el último Chevrolet Impala de décima generación dejó la línea de montaje en Detroit-Hamtramck. Las instalaciones se reacondicionarán para vehículos eléctricos.
Por José Virgilio Ordaz.
Esta historia ya la leímos por lo menos en dos ocasiones con anterioridad. El Chevrolet Impala cesa producción y se retira del mercado.
Adiós definitivo al Chevrolet Impala
Esto pasó en 1985 y 1996. Pero ahora sí parece ser definitivo, a medida que los grandes sedanes ceden su sitio como el transporte familiar por excelencia ante el dominio del segmento SUV-Crossover.
Primero, prototipo
Fue durante el Motorama de 1956, precursor de los Salones del Automóvil, que General Motors presentó un prototipo que, para su denominación, tomó el nombre de un antílope conocido por sus extensos saltos en las sabanas de África: Impala.
Variante del Bel Air
Luego, en 1958 el nombre se rescató para las variantes de alta gama de dos puertas del Bel Air, el representante de Chevrolet de la camada de mellizos de GM, cada uno con su variante tope: Cadillac Eldorado Seville, Buick Roadmaster Riviera, Oldsmobile Super 88 Holiday y Pontiac Bonneville Catalina.
Moda de la época
El acabado llegó también a sedanes menos exclusivos, a tiempo para la época de las grandes aletas, combinadas con las famosas calaveras de ‘ojos de gato’. El cuerpo se fue suavizando, pero siempre con dimensiones náuticas, hasta la crisis petrolera de los 70. Finalmente, en 1985 dejó en solitario al Caprice.
Chevrolet Impala SS
El Chevrolet Impala volvió a la vida por tres años-modelo, de 1994 a 1996, con el acabado SS que aún mucho recuerdan con nostalgia. Combinó la base de propulsión del Caprice para policía con un V8 LT1 basado en el motor del Corvette, con 260 hp.
Tracción delantera
GM había comenzado a mudar sus autos grandes de propulsión trasera a tracción delantera. Para cuando vio la luz por tercera vez en 1999 para sustituir paulatinamente al Lumina, el Impala recibió dicha configuración, aunque se colocó de nuevo como el sedán más grande de la marca.
Fin de una era
Tres generaciones vieron las ruedas delanteras motrices. La última comenzó a producirse en 2013 en Oshawa, Ontario, aunque se retiró de dicha planta en 2019. Las variantes de Detroit-Hamtramck, Michigan, se mantuvieron hasta el día de hoy. La planta ahora producirá vehículos eléctricos.
Un minuto de silencio
El Chevrolet Impala de tracción delantera tuvo una variante Coupé, que rescató el nombre Monte Carlo, aunque esta se despidió en 2007. Le acompañan en el panteón automotriz sus primos corporativos, el Oldsmobile Intrigue, el Pontiac Grand Prix, el Buick La Crosse y el Cadillac XTS.