Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).
Nacida como FX en el año 2003, la segunda generación de la SUV mediana de Infiniti apareció en 2008, para en 2013 recibir la denominación QX70, según la nueva nomenclatura de la marca.
Pese a haber sido una de las propuestas más agresivas de su segmento, tanto en potencia y manejo como en diseño, con más de nueve años de producción la QX70 comenzó a adolecer de cierta veteranía en sistemas como el multimedia, como se pudo constatar en el último Master Test de su segmento.
Curiosamente, aunque en su mercado más importante, los Estados Unidos, apenas y se mantiene arriba del sedán Q70, en lo que va del año ha observado un crecimiento de más del 50% en sus ventas al norte del río Bravo. Pese a ello, en Infiniti saben que es uno de sus productos más longevos y que, a diferencia de la QX50 y la QX80, no tiene un sustituto planeado luego del año-modelo 2017.
Se maneja un posible regreso más allá del 2020, quizá entre 2021 y 2022, aunque una de las teorías es que podría compartir base con la siguiente generación de la Nissan Murano, con lo que abandonaría la plataforma de propulsión trasera derivada del Nissan Z.
Aunque por el contrario, el sedán Q70 ha visto reducidas sus ventas, tiene la ventaja que se amortiza mejor su producción al compartir buena parte de su estructura con los sedanes de Nissan Cima y Fuga. Las últimas unidades de la QX70 se ofrecerán sólo con motor V6 3.7 litros. El modelo continuará a la venta en México y otros países.
Además de sus otras SUVs, Infiniti, como tantas otras marcas de lujo, centrará sus esfuerzos en el desarrollo de autos eléctricos.