Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).
En Estados Unidos, todavía uno de los mercados más importantes del orbe por volumen, es difícil competir en el segmento generalista si no se tiene una SUV monocasco de unos cinco metros, tres filas de asientos y más de 250 HP.
Así como en años anteriores las ventas de las grandes camionetas de carrocería sobre bastidor se fueron a pique, en el mercado estadounidense el último descalabro fue para los sedanes medianos, con caídas en los últimos meses de hasta el 25%. Sin embargo, SUVs y Pick-ups medianas y compactas mantienen ventas sanas, de ahí que sea en este tipo de vehículos de pasajeros en los que VW podrá mayor énfasis en los siguientes meses con el fin de reconquistar el gusto norteamericano.
Así, al próximo lanzamiento de la Tiguan LWB que se armará en México, le seguirá una SUV mediana que compartirá plataforma y línea de montaje con el Passat NMS en Chattanooga, Tennessee. Hasta ahora, se había rumoreado que el nombre para la camioneta podría ser Teramont, pero Volkswagen acaba de solicitar el registro en la oficina americana de patentes de un apelativo que, literalmente, suena fuerte: Atlas.
Esto cuadra con las declaraciones de Hinrich Woebcken, director de Volkswagen para América del Norte, que en meses anteriores señaló que la nueva SUV utilizaría “un nombre mucho más fácil de pronunciar, de estilo americano”. El diseño se basará en la Cross Blue Concept mostrada hace tres años (en la galería).
La Atlas podría tener dos ofertas mecánicas: además del V6 3.6 litros del Passat, un 2.0 litros con más de 230 caballos como base. Con una nutrida lista de rivales copada por modelos americanos, japoneses y coreanos; la SUV, comoquiera que vaya a llamarse, haría su presentación oficial en los meses siguientes, quizá en el Salón de Los Ángeles o el NAIAS de Detroit, para iniciar ventas en el segundo semestre de 2017.