Por José Virgilio Ordaz.
Hace apenas unos días nos enterábamos que la firma asiática Hyundai descartaba de tajo que existiera un auto deportivo propiamente dicho en su gama y que centraría sus esfuerzos en desarrollar una división de alto rendimiento basada en sus vehículos existentes.
Ahora, su coterránea KIA hace una afirmación diametralmente opuesta, en voz de Paul Philpott, director de la división del Reino Unido, quien afirma que un deportivo de la marca en toda regla aparecerá antes de 2020; agrega que no sólo estará influenciado por el Concepto GT de propulsión trasera presentado en Frankfurt durante el 2011 (primera imagen), también por el más reciente GT4 Stinger (segunda imagen).
El auto será un modelo global de precio asequible, que además de no estar estructuralmente basado en sus autos existentes, no compartirá componente alguno con el resto del catálogo del fabricante coreano. El ejecutivo añade que KIA tendrá un competidor para el segmento de crossovers subcompactos, al estilo del Nissan Juke, inspirado en el concepto Niro de 2013 (tercera imagen) destinado a reemplazar al Picanto (recién actualizado) en 2017.
Los modelos más deportivos actualmente en la cartera de KIA son los cee'd GT & pro cee'd GT; hatchbacks compactos de cinco y tres puertas emparentados estrechamente con el recién lazado sedán Forte, los cuales echan mano de un motor 1.6 turboasistido con 201 hp y 265 Nm de par, capaces de hacer el 0 a 100 en 7.6 segundos; aunque su modelo más potente de momento es el K900, K9 o Quoris, el cual es impulsado por un V8 de 5.0 litros con 420 hp y 376 lb-pie; y que no se vería nada mal en un GT.