Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen)
Ya habíamos visto un adelanto de la celebración del centenario de BMW con los M6 que competirán en el campeonato IMSA. Ahora, continuando con su lema de “los próximos 100 años”, develan el concepto Vision Next 100, con el que nos comparten su visión de cómo será el siguiente siglo para la marca. De hecho, en BMW consideran que la mayoría de estas tecnologías estarán disponibles al gran público en no más de 30 años.
Para comenzar, se encuentra presente la tecnología que promete ser el futuro en el mediano plazo, es decir, la conducción autónoma. Además, promete más confort, más asistencia y una experiencia más intensa, junto con materiales más ligeros, mayor posibilidad de personalización y sistemas inteligentes de asistencia a la conducción.
En el exterior y el interior nos encontramos con paneles de “geometría cambiante” con una serie de triángulos que se adaptan al movimiento y a las necesidades aerodinámicas –el Cx es de 0.18-. Las puertas son diédricas adelante y atrás y estas últimas combinan la citada configuración con una disposición “suicida”.
Al interior, los casi 800 pequeños triángulos móviles, denominados “Alive Geometry”, distribuidos en el tablero y los laterales, se mueven de forma ordenada simulando gestos para dar información al conductor en “4D”, en conjunto con la información que se proyecta en el parabrisas, a modo que todo lo anterior sustituye al instrumental actual, en BMW afirman que estos elementos tendrán funciones que todavía están por desarrollarse.
El Next 100 tiene dos modos de conducción, Ease y Boost. El segundo está enfocado a cuando es el conductor el que lleva el auto, mejorando la experiencia de manejo y optimizando la información que se le proporciona, con el sistema de “geometría viviente” señalando el mejor camino a seguir o advirtiendo de la presencia de otros autos.
En modo Ease, se activa la conducción autónoma y desaparecen el volante y la consola central, mientras que se giran los asientos frontales para que el interior trate de simular la apariencia de una sala de estar. Los 800 triángulos previenen a los ocupantes de los giros y los frenados, a modo que no les resulten intempestivos.
En el exterior, los paneles móviles y los sistemas de iluminación también cambian su forma para informar a otros automovilistas y transeúntes sobre el modo de manejo en que se encuentra el auto; de hecho, imitarán gestos como cuando un conductor señala con la mano que ha visto al peatón y que le permitirá el paso.
Estas son algunas de las propuestas para los siguientes años de la Bayerische Motoren Werke, donde, a pesar de las innovaciones, el logo del círculo ajedrezado y los riñones gemelos continuarán como sello característico de la estirpe de la marca, que promete un concepto para cada una de sus divisiones (BMW Motorrad, MINI y Rolls-Royce), los cuales se develarán entre junio y octubre, así que la celebración apenas inicia.