Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).
Apenas a mediados de año conocimos al Mercedes-AMG GT R, la variante más potente del coupé desarrollado en Affalterbach, que llevaba el V8 4.0 litros hasta los 585 HP.
No era la creación más poderosa del especialista, pero si la de talante más deportivo gracias a su relación peso/potencia derivada del uso intensivo de fibra de carbono, así como de elementos de intención netamente velocista como rines de aluminio forjado de 19 pulgadas delante y 20 atrás, sistema de escape de titanio, dirección activa trasera, vías ensanchadas, elementos aerodinámicos revisados, un modo de manejo específico para pista y como remate, un nuevo tono de pintura denominado Green Hell Magno.
¿Y todo esto ha redituado? Es precisamente en el "Infierno Verde" donde AMG ha decidido poner a prueba su creación y los resultados han superado todas las expectativas.
7 minutos con 10.92 segundos es lo que le ha tomado recorrer los 26 kilómetros de la pista de Nordschleife, con sus 90 curvas y 300 metros de desnivel. Con esto, el GT R no solo obtiene el séptimo puesto absoluto en el trazado, sino que implanta un nuevo registro para un auto de propulsión trasera de calle, dejando atrás el crono de 7:11.57 del Gumpert Apollo de 700 caballos y los 7:12.13 del Dodge Viper SRT-10 ACR.
Para superar el tiempo del AMG, se requiere de vehículos que no son legales para la calle, como el Radical SR8LM, o preparaciones extremas de tracción total como el Porsche 918 Spyder, el Lamborghini Aventador LP 750-4 Superveloce, o el Nissan GT-R Nismo.
La proeza fue realizada por el piloto Christian Gebhardt de la publicación Sport Auto, usando los neumáticos de calle Michelin Pilot Sport Cup 2 que monta el Mercedes-AMG GT R de serie.