Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).
El Instituto para la Seguridad en las Carreteras de los Estados Unidos (IIHS) es no sólo uno de los organismos independientes especializados en seguridad automotriz con la batería de pruebas más extensa en todo el mundo, sino también con algunas de las evaluaciones más demandantes.
El caso más sonado es el del impacto frontal del 25% del auto (Small Overlap Test), en el que el golpe contra una barra fija simula el choque contra un poste, un árbol u otro auto, en el caso particular en que, aunque se intente maniobrar, no se alcanza a esquivar el obstáculo por completo, distribuyendo toda la fuerza del impacto en la menor área posible.
Afortunadamente para el modelo más reciente probado, la MINI Countryman, ha superado no sólo ésta, sino también el resto de las pruebas de impacto (frontal del 50%, lateral, lateral contra poste, volcadura, trasero) con la valoración más alta posible, “Bueno”. Un bajo nivel de deformación y un desplazamiento mínimo del tablero ayudan.
El sistema de prevención de choque alcanza una calificación Avanzada, sin embargo, en la prueba del sistema de faros, estos son evaluados como “Marginales”, de ahí que se quede a un paso de alcanzar el reconocimiento Top Safety Pick +, quedando únicamente como TSP (sin el “plus”), de acuerdo a los cada vez más estrictos criterios del organismo independiente.