La planta de Puebla de la armadora alemana celebró el hito, alcanzado luego de casi 40 años de producción del popular sedán compacto.
Por Edmundo Cano
Volkswagen de México celebró con bombo y platillo la producción de seis millones de unidades del Jetta. El ejemplar que marcó este nuevo récord fue un GLI color Rojo Tornado fabricado para el mercado mexicano, que fue recibido desde la línea de ensamble por Steffen Reiche, presidente del Consejo Ejecutivo de Volkswagen de México, Edgar Estrada, director de la marca Volkswagen en México, y directivos y personal técnico que labora en el Segmento 1 de la planta de Puebla.
La celebración no es para menos, pues Puebla ha sido el hogar en México del Jetta desde 1981, cuando se llamaba Atlantic, y representa, de hecho, el modelo con mayor volumen de producción histórica en la planta, la cual ha cambiado y crecido con el paso de las siete generaciones del sedán, para poder albergar su producción.
Desde la apertura de una nueva nave de producción de motores en los ochenta, y la instalación de una línea de estampado y cabinas de soldadura láser para el arranque de producción de la generación A5 en 2004, el Jetta ha marcado el ritmo en cuanto a los cambios que ha sobrellevado Puebla.
Tan es así que, para la producción de Jetta A6, la fábrica vivió su mayor transformación con la construcción del Segmento Poniente, en el que se edificaron más de 100 mil metros cuadrados de naves productivas y áreas auxiliares.