Por Héctor Torres Fotos: Carlos Quevedo Edición para online: Manuel Fernández
Paneles nuevos de carrocería acomodan los cambios más significativos, ahí con la parrilla contrastante y la calavera con delineado similar al visto en el Viper. Adentro, un sutil retoque ordena de manera más limpia indicadores e instrumentos, resaltando el diseño de un volante calefactable con sujeción aumentada respecto del liso y resbaladizo en el modelo previo.
Lo que faltaba
Ya casi 10 años han pasado desde que se presentara la reinterpretación del Charger y más que las cuatro puertas que trajo consigo, para el que escribe resultó de mayor contrariedad el empleo de la caja de cinco marchas, una pieza remanente de la alianza con Daimler que si bien podía entenderse al momento, poco tenía que hacer. Después de todo, ¿Cuál es el punto de modernizar un clásico si no se utiliza la tecnología de punta a la mano? La transmisión de ocho velocidades lo resuelve.
La ZF 8HP ha sido cariñosamente rebautizada “TorqueFlite” y está propiamente caracterizada recordando al pomo de los ’71 en su empuñadura. Además de exprimir los 370 equinos del 5.7 litros, agrega competencias inéditas al modelo como la función Launch Control, programable entre las 1,500 y 3,500 vueltas y modos de conducción. La gestión es inteligente, ejecuta cambios descendentes bajo frenadas firmes y retiene el corte de inyección si se le opera en “Manual”.
No es tan rápida como en otras aplicaciones (BMW, por ejemplo) pero sí notablemente más que la otrora 5G-Tronic, especialmente cuando se acelera a fondo y brilla por su suavidad entre transiciones. A la agilidad condicionada por el balanceo de su masa y una dirección que apunta mejor de lo que comunica, suma reacciones de crecida diligencia, tangibles sobre todo en el pedal derecho. El acierto de integrarla se enfatiza con un sensible aumento en el rendimiento de combustible, guardando las debidas –y realistas– proporciones que un V8 implica.
Entre dos épocas
Sin rivales directos en nuestro país, técnicamente hablando, el Charger sigue siendo único en su género. Quizás algunas ofertas premium empaten el esquema de tracción trasera y ocho pistones, pero rebasan considerablemente la etiqueta.
Así, queda en la mira de los amantes de los bloques grandes, o como atrevida opción para el que no encuentra ese toque de personalidad en los sedanes medianos de lujo.
Unidad probada
584,900 pesos (a junio de 2015)
NOS GUSTA
Energía del V8
Nivel de equipamiento
Ineludible diseño
NOS GUSTARíA
Más ruido del HEMI
Oferta de paquetes performance
El 392 en la gama
Resumen técnico
MOTOR
Tipo/cilindrada: V8, 5.7 l
Potencia máxima: 370 hp a 5,250 rpm
Par máximo: 536 Nm a 4,200 rpm
TRANSMISIÓN
Caja: Automática, ocho velocidades
Tracción: Trasera
DIMENSIONES
Largo x ancho x alto: 504 x 190 x 147 cm
Distancia entre ejes: 305 cm
Cajuela: 467 litros
Tanque de combustible: 70 litros
Peso vacío: 1,934 kg
PRUEBAS AUTOMÓVIL (a 2,240 msnm)
0 a 400 metros: 15.43 s
0 a 100 km/h: 7.61 s
Rebase 80 a 120 km/h: 4.64 s
Frenado de 100 a 0 km/h: 36.5 m
Consumo medio: 6.64 km/l