En su manejo, tal como en el interior, el Elantra queda justo en el promedio de su segmento. La dirección tiene tres posibilidades de asistencia: Comfort, Normal y Sport. La primera es idónea para estacionar o maniobrar en espacios reducidos, las otras dos sirven para enfrentar un tramo revirado o una autopista a velocidades crucero. En ciudad rueda nervioso y en autopista gana finura sin ser del todo homogéneo.
El buen desempeño se ayuda por la caja automática de seis velocidades, con un escalonamiento corto de primera a segunda al perder menos de 2,000 vueltas y una operación adecuada por suavidad y rapidez al utilizarla en modo manual.
Los frenos son apenas los ideales para un uso moderado, con poco recorrido muerto y correcta dosificación. Al final las distancias, si bien consistentes, se mantuvieron en la media.
Y es que así es fácil definir al Elantra, un auto en la media de sus rivales en muchos aspectos. Hace bien su tarea sin destacar en algún apartado en específico, una compra honesta y racional empacada en una carrocería que no pasa desapercibida.
NOS GUSTA
Ergonomía
Calidad de acabados
Motor bien aprovechado
NOS GUSTARíA
Mayor habitabilidad trasera
Marcha menos nerviosa
Frenos más efectivos
Resumen técnico
MOTOR
Tipo/cilindrada: L4, 1.8 l
Potencia máxima: 145 hp a 6,500 rpm
Par máximo: 176 Nm a 4,700 rpm
TRANSMISIÓN
Caja: Automática, seis velocidades
Tracción: Delantera
DIMENSIONES
Largo x ancho x alto: 455 x 177 x 144 cm
Distancia entre ejes: 270 cm
Cajuela: 419 litros
Tanque de combustible: 48 litros
Peso vacío: 1,307 kg
PRUEBAS AUTOMÓVIL (a 2,240 msnm)
0 a 400 metros: 18.85 s
Rebase 80 a 120 km/h: 9.51 s
Frenado de 100 a 0 km/h: 43.22 m